Para defender a su novia de un taxista agresivo, Marcos golpea a éste con una piedra, causándole involuntariamente la muerte. Inicia en ese momento una imparable espiral de violencia y asesinatos para encubrir su crimen.
Eloy de la Iglesia ("El pico", "El pico 2", "El diputado") era un kamikaze que creaba cine desde lo más profundo de sus vísceras. En esta película que cuenta con Vicente Parra, Eusebio Poncela y Emma Cohen, se arriesgó al máximo, resultando una de las cintas más duramente castigadas y mutiladas por la censura. A pesar de esto, aún hoy el visionado es turbador, con ese extrarradio sucio, marginal, cálido y sin esperanzas y ese retrato sin concesiones de los personajes. La película tiene tantos defectos como virtudes, pero su sordidez extrema es el factor decisivo para recomendar su visionado.
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