El pasado viernes se inauguró en el Museo de Bellas Artes de Castelló una exposición con 133 obras de Henri Cartier-Bresson, probablemente el fotógrafo más reputado del siglo XX, que han traído Castelló cultural y la Fundació La Caixa, y que yo he podido visitar hoy, aprovechando que el museo no cierra a mediodía (ya podían aprender los que organizan “Espais de llum”, que me quedaré sin visitar por culpa de su horario; manda narices que a mediodía puedas ir a comprar ropa a las tiendas pero no a ver determinadas exposiciones. A esto se le llama fomento de la cultura, sí señor).
La muestra recoge fotografías desde principios de los años 30 hasta finales de los setenta, con retratos de paisajes, de la sociedad y de personajes relevantes de muchos países distintos. Ofrece la posibilidad también de consultar unos pocos libros sobre él. Como dato negativo, señalar que la iluminación en algunos puntos no es la más correcta.
Llama la atención cómo al fotografiar algunos sucesos relevantes tales como la coronación de Jorge VI o la incineración de Gandhi él se centraba en fotografiar a la gente que contemplaba el hecho histórico. O sus composiciones urbanas, con una cuidadísima comosición geométrica. Pero lo que más me fascina es cómo supo atrapar la mirada de la gente anónima.
La exposición estará abierta hasta el 14 de junio y recomiendo su visita a todo aquél que tenga la posibilidad.
La muestra recoge fotografías desde principios de los años 30 hasta finales de los setenta, con retratos de paisajes, de la sociedad y de personajes relevantes de muchos países distintos. Ofrece la posibilidad también de consultar unos pocos libros sobre él. Como dato negativo, señalar que la iluminación en algunos puntos no es la más correcta.
Llama la atención cómo al fotografiar algunos sucesos relevantes tales como la coronación de Jorge VI o la incineración de Gandhi él se centraba en fotografiar a la gente que contemplaba el hecho histórico. O sus composiciones urbanas, con una cuidadísima comosición geométrica. Pero lo que más me fascina es cómo supo atrapar la mirada de la gente anónima.
La exposición estará abierta hasta el 14 de junio y recomiendo su visita a todo aquél que tenga la posibilidad.
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