martes, 10 de junio de 2008

Persona


Una actriz se queda muda en mitad de una función y tras ser analizada los médicos se dan cuenta de que su estado es voluntario, y la envían a una solitaria casa a orillas del mar con una joven enfermera. Entre las dos se establecerá una curiosa y cambiante relación.

Película inclasificable sobre la soledad, la incomprensión y el sufrimiento del alma. Se trata de una de las más prestigiosas obras de Ingmar Bergman, en la que emplea multitud de recursos surrealistas para plantear la historia de una forma abierta, experimental, ambigua y original. En ella el genio sueco se rodea de varios componentes de su habitual equipo: las actrices Liv Ullman –directora de “Infiel” o “Encuentros privados”-y Bibi Andersson y el director de fotografía Sven Nykvist. Una prodigiosa obra maestra.

1 comentario:

Anónimo dijo...

No es una obra maestra, es ¡¡¡UNA PUTA OBRA DE ARTE!!! Joer, con Bergman...
Acabo de leer por ahi que el guión lo escribió mientras estaba en un hospital por un ataque de depresion y estrés que le causó ser el Director de la Cinematrografía Sueca.
Brutal! :-O