El cine iraní últimamente nos ha deparado muchas películas interesantes, de la mano de Abbas Kiarostami, Jafar Panahi, la familia Makhmalbaf o Bahman Ghobadi. De este último es la película que da título a esta entrada.
La película narra las vivencias de un grupo de niños en el kurdistán iraquí poco antes de la invasión estadounidense. Unos habitantes que buscan instalar una antena parabólica para seguir las noticias sobre el inminente inicio de la guerra; un espabilado chico que lidera al grupo de niños, muchos de ellos mutilados, que se dedican a buscar minas para después venderlas; un joven que tiene visiones sobre el futuro que llega de otro pueblo con su hermana y otro niño...Con estos ingredientes y gran parte de lirismo Ghobadi construye una película de esas que no se olvidan. Y es así porque es una película durísima, atroz, un auténtico puñetazo en el estómago del espectador, resultando finalmente casi insoportable su visión. Este tipo de películas que nos aproxima a las consecuencias de la guerra son positivas e incluso necesarias, pero esta película puede resultar de una crudeza excesiva.
No me atrevería a recomendarla a mucha gente, a pesar de que me parece una muy buena película.
1 comentario:
ye, aquesta la van fer fa poc en la tele, estava bé :P
PD: al final serà dinar, no sopar
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