Tras cada victoria del VCF los comentarios de los periodistas son los
mismos: "ha vuelto el gran Valencia", "el Valencia ha mejorado mucho"
y similares. Ciertamente ayer el Valencia fue un equipo sólido, pero
tampoco fue para lanzar cohetes. El rival era muy débil y tampoco se
hizo nada del otro mundo. Pero buenos son los tres puntos, que nos
darán algo de tranquilidad para el parón liguero.
Sí han habido dos cosas que me han gustado.
Primero: Koeman, como pedíamos, ha venido con mano firme. Se puede
discutir que haya "castigado" a unos jugadores y no a otros que se lo
merecían tanto como ellos, pero el hecho es lo importante, y espero
que se hayan dado todos por aludidos, los que no jugaron y los que sí
lo hicieron.
Y segundo: la base defensiva del equipo debe ser la formada por
Caneira, Helguera y Marchena. Estos tres jugadores están a un nivel
muy superior al resto de compañeros de la zaga. Personalmente optaría
por una defensa Miguel-Caneira-Helguera-Moretti, con Marchena de
centrocampista defensivo, pero me sirve cualquier combinación que
incluya a los tres, como la que ayer planteó el entrenador.
De la Junta General Ordinaria de ayer nada que decir: Soler domina
socialmente el club sin oposición y como era previsible no hubo ningún
sobresalto. Sí me gustaría resaltar que ayer se aprobaron las cuentas,
que muestran unas pérdidas en el pasado ejercicio de 32 millones de
euros. Es un dato más que preocupante. La deuda año a año aumenta, y
por muchos "pelotazos" que se den la situación es insostenible.
3 comentarios:
Eres una puta. No afegiré res més :P
A mi sí que me pareció que jugásteis de una manera más alegre que en otras ocasiones, aunque este año vamos a tener todos muchas más sorpresas de las que esperamos, ya lo verás.
Bien que Kodoman emplee el susodicho en el vestuario ese de julandras que tenéis.
Por cierto, por primera vez en mi vida vi una entrevista con el Soler en la SEXta ... ¡y parecía una persona coherente y todo! ¡Qué no le pongan más guiones escritos, joder!
Sí, sin duda jugamos mejor, pero en ello tuvo mucho que ver el planteamiento de los murcianos, que se abrieron mucho más de lo acostumbrado en equipos que luchan por la permanencia.
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